Ir al menú de navegación principal Ir al contenido principal Ir al pie de página del sitio

Artículos

Ahead of Print

La Agenda Política del ‘Agroextractivismo Verde’ en América Latina

DOI
https://doi.org/10.4067/s0718-090x2024005000101
Enviado
febrero 27, 2024
Publicado
2024-02-27

Resumen

¿Cuál es la agenda política que anima, justifica y legitima el extractivismo de recur­sos en el marco de las transformaciones hacia la creciente sustentabilidad y la ac­ción climática? Esta es una cuestión de creciente relevancia a nivel mundial y mul­tisectorial a la que buscamos ofrecer respuestas desde el campo latinoamericano. Para ello comenzamos con un debate sobre la economía y la ecología política del extractivismo agrario contemporáneo. Después examinamos el papel de diversos actores estatales y sociales tras el auge del agroextractivismo en la acción climática en Bolivia, Guatemala y Paraguay. En Bolivia, las alianzas de Evo Morales con di­versas clases de capital y su dependencia de la economía extractiva acabaron pro­vocando su caída al perder el apoyo de sus bases y no estar dispuesto a renunciar al poder del Estado. El auge reciente de los complejos de cultivos comodín de la caña de azúcar y la palma aceitera en Guatemala se asienta sobre la nueva agenda del ‘populismo corporativo autoritario.’ Esta conlleva concesiones políticas a las personas más desfavorecidas a través de transferencias públicas y de sistemas de gobernanza multiparte, como en el caso de los regímenes políticos populistas con­vencionales. Pero además el populismo corporativo autoritario implica concesio­nes a las clases trabajadoras y al medio ambiente en el ámbito productivo privado. La violencia, sin embargo, sigue siendo clave en esta agenda política del poder, aun si ahora se legitima bajo la defensa del Estado de Derecho. En Paraguay, el feroz rechazo a los intentos de Fernando Lugo para regular el agronegocio culmi­nó en un ‘golpe parlamentario’ orquestado por la clase terrateniente y precedido por violencia extrema contra el campesinado. El golpe facilitó la expansión de un modelo agroextractivo caracterizado por la adopción de nuevas variedades de soja genéticamente modificadas, la violencia estatal y el despojo y marginación de la población campesina e indígena. Tras este análisis por países planteamos una dis­cusión más general sobre cómo las alianzas entre actores estatales, elites y capital debilitado el potencial transformador de gobiernos progresistas para mejorar las condiciones de vida de las y los trabajadores. Con este fin, la triple alianza no sólo recurre a las tradicionales estrategias de influencia sobre marcos normativos y dis­cursos legitimadores, sino también a nuevas estrategias políticas que combinan la generación de consentimiento popular al orden agroextractivista con la violencia y represión selectiva amparada en la defensa del Estado de Derecho. Concluimos subrayando cómo el giro ecomodernista 'verde' en la agenda política del agroex­tractivismo desplaza la atención de la paradoja del creciente uso de recursos na­turales para enfriar el planeta hacia las innovaciones técnico-administrativas que requieren diversos complejos corporativos de cultivos comodín para reproducir sus condiciones naturales y sociales de producción de bioenergía y biomateriales por ‘el bien común.’